lunes, 29 de febrero de 2016

Plan de orientación familiar

Buenas tardes grupo, luego de esta entrada pueden publicar su plan de acción, ya todas tienen las recomendaciones sobre el trabajo asignado, espero las consideren en un futuro.
 Las felicito por cumplir con las actividades. Considero que algunas fueron más preocupadas que otras, sin embargo las invito a ser mejor cada día, opino que un mal estudiante jamás será un buen docente.  Para finalizar les dejo una cita de Steve Jobs “La única forma de sentirte satisfecho es hacer un gran trabajo y eso sólo es posible amando lo que hacen. Si aún no lo han encontrado, sigan buscando, no se detengan

domingo, 28 de febrero de 2016

ELEMENTOS RELEVANTES EN LA CARACTERIZACIÓN DE LA FAMILIA VENEZOLANA



REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN SUPERIOR
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA EXPERIMENTAL LIBERTADOR
INSTITUTO DE MEJORAMIENTO PROFESIONAL DEL MAGISTERIO
NÚCLEO PORTUGUESA – EXTENSIÓN ACADÉMICA ACARIGUA

http://www.opinion.com.bo/opinion/suplementos_fotos/2013/0520/023433_600.jpg
ELEMENTOS RELEVANTES EN LA CARACTERIZACIÓN 
DE LA FAMILIA VENEZOLANA



INTEGRANTES:
Luisana Pineda, C.I.15.866.662
Yolitza Pineda, C.I.19.636.099
Liliana Ríos, C.I.19.171.836
Elsilub Díaz, C.I.12.448510
Eva Angulo, C.I.15.630786
Maryuri Espinoza, C.I.16.042.688
PROFESORA: Michel Sánchez





FEBRERO 2016








ÍNDICE


Pág.
Introducción…………………………………………………………………
3
Elementos relevantes en la caracterización de la familia venezolana……………
4
Criterios positivos o buenos de la familia venezolana………………………….
15
Criterios negativos o malos de la familia venezolana…………………………..
17
Conclusión…………………………………………………………………..
20
Referencias Bibliográficas……………………………………………………
21
Anexos……………………………………………………………………...
22










INTRODUCCIÓN

    Hay toda una gama de definiciones y conceptos lingüísticos, que al ser contrastados con nuestra realidad nacional podemos observar que, muchas veces, los mismos no concuerdan con lo que verdaderamente tenemos en nuestro país. Con esta orientación podemos determinar que la concepción de lo que nosotros conocemos como familia va a conformarse por nuestra propia esencia cultural.

    Hay un sistema de ideas, valores y significados que van regulando nuestra cultura y que tiene sentido en un contexto humano singular (mundo de vida), que puede estar condicionado por la actividad de sus individuos, su economía, organización política, asentamiento geográfico, entre otros factores. Este mundo de vida, permite explicar el modo de conocer que se va conformando codificadamente en el subconsciente de un colectivo particular y tiene una orientación y reglamentación propias. Esto lo llamaremos "episteme". La modernidad, es un episteme que trajo la expansión cultural europea a Venezuela y todos los países occidentales.

    Ahora se puede explicar por qué los diccionarios signados por el episteme de la modernidad no logran explicar nuestra familia venezolana. Por ello, el investigador social debe acceder a la información desde la propia realidad, por ejemplo, a través de historias de vida convivida. Un solo individuo puede ser una síntesis subjetiva de su comunidad, a través de su mundo de vida y su episteme. El conocer la verdad nacional intrafamiliarmente nos lleva a saber, rápidamente, que la familia popular venezolana tiene una estructura perfectamente definida: hay un estrecho nudo relacional madre – hijo.




ELEMENTOS RELEVANTES EN LA CARACTERIZACIÓN DE LA FAMILIA VENEZOLANA

    Desde épocas antiguas la sociedad no se compone de individuos aislados e independientes sino de familias, esta familia a su vez, puede ser definida según el autor Weber (1992) como “aquella forma de organización y unidad socio – cultural  de tipo cerrada”, mantenida por vínculos consanguíneos o no, fundamentada en el proceso de apareamiento y reproducción, orientada a la satisfacción sexual, afectiva y económica que asegura la crianza y educación de sus miembros y en la cual existe una comunidad de servicios; unidad que se ve reforzada o legitimada por prácticas de coacción, interacción e intercambio entre los individuos que la constituyen y la cual radica en el hogar, es decir, supone la convivencia bajo un mismo techo, en la cual como espacio plural común, el individuo va a tener contacto directo con el mundo, sus disposiciones, deberes y derechos, criterios morales, prejuicios, entre otros.

    No obstante, para algunos autores, la organización familiar venezolana posee unas características y especificidades que la diferenciarán de otras formas de organización familiar presentes en América Latina y el Caribe, la familia europea y anglosajona definió su entramado organizacional en torno a la reducida lógica de la familia nuclear, caracterizada por la relación conyugal, central y monógama, grupo de tipo íntimo y fuertemente organizado, constituido por el matrimonio y sus descendientes, en la que existe una imputación filial de tipo cognaticio y cuyo modelo de residencia es de tipo neolocal, donde:

    Las condiciones de desarrollo de un sentido de la continuidad de las generaciones ya no existen, se conserva muy poco o nada la memoria de los ancestros y no hay preocupación por los descendientes; la familia de este tipo de sociedad se inscribe en un tiempo corto, solo interesan los íntimos.     La familia venezolana por el contrario, su organización, modos interactivos, valoraciones, roles y status definidos dentro de ella, van a estar condicionados por la clase social, es decir, la organización de la institución familiar venezolana no es solo una, por el contrario, dependerá de la pertenencia de sus miembros a una determinada clase social.

    La familia venezolana que en la actualidad conserva elementos comunes con la familia europea y anglosajona será aquella familia de las llamadas clases altas y media, las cuales poseen un significativo apego a la tradición y el conservadurismo, y que en lo que refiere su forma organizativa ha calcado las características de la organización familiar hegemónica, es decir, aquella de tipo nuclear ( Ver Anexo 2).

    La familia en las clases populares por su parte, se caracteriza por ser de tipo extensa (Ver Anexo 1), constituida por la pareja, los(as) hijos(as) y sus familias bajo una misma residencia, la cual puede comprender abuelos(as), nietos(as), hermanos(as), tíos(as), primos(as), entro otros, es decir, aquella donde convergen las denominadas en la teoría parsoniana como:

  • Familia de orientación, en la cual el individuo nace, crece y se desarrolla durante largos periodos de niñez y adolescencia, y donde por lo general ha de mantenerse hasta la llegada de un grado de madurez socio-económico que le permite la independencia; se compone generalmente de la madre, el padre y hermanos.
  • Familia de procreación, es la forma de organización familiar que el individuo funda a partir del establecimiento marital, alcanzado un nivel socio-económico independiente; constituida tradicionalmente por los cónyuges y su descendencia, y que han de constituir la unidad familiar de la adultez y la vejez.

Ahora bien, este hecho se hará manifiesto principalmente por dos elementos:

  • Por la sobrevaloración de los afectos en la institución familiar, dada fundamentalmente en Latinoamérica, y los estrechos vínculos afectivos existentes entre sus miembros, pues,  para Parsons (1968) “se considera que el afecto mutuo entre los miembros de la familia es la base de su solidaridad y lealtad” (p.52).
  • Producto del limitado poder adquisitivo de esta clase popular, y la imposibilidad de obtener vivienda y costearla de manera completa por parte de la nueva familia que se establece.

    La familia en su concepción genérica, inscrita en una lógica patriarcal (Ver Anexo 3), como así mismo, aquella desarrollada en Europa y Estados Unidos, en su generalidad se ha organizado en torno a la autoridad y dominio del padre; pues la masculinidad ha sido entendida incuestionablemente, condicionada y legitimada a partir de la función del hombre cómo <>, pues según Hurtado (1999) “esta obligación es la que justifica su relación de padre en la filiación: es el ´padre económico` (un aspecto débil del pater propicio), después de ser ocasionalmente el padre biológico o genitor” (p. 39-40).
Este proveer será de tipo:
  • Proveedor económico (y en consecuencia proveedor de seguridad y estabilidad para la familia)
  • Proveedor de satisfacción y felicidad emocional (de acuerdo al mito de cenicienta)
  • Proveedor de placer sexual (por ser el sujeto fálico)

    En las clases altas y medias venezolanas el hombre, padre, poseedor de recursos y proveedor continúa teniendo autoridad, pues para Cichelli (1999) “la protección material incumbe al padre, ya responsable del sostenimiento de su esposa y la educación moral está a cargo de la madre” (p. 80).

    Así mismo, en otros casos, las familias de la clase media y alta se caracterizan por la corresponsabilidad en cuanto al aporte económico de los cónyuges, y en muchos casos el ocio femenino, pues en estas clases la tenencia de recursos económicos estará estrechamente asociada a concepciones de tipo conservadoras, por esta razón, muchas mujeres de las clases medias y alta manifiestan:
  • Nunca haber trabajado
  • Trabajar posterior a la separación o fallecimiento del marido
  • Han pasado a depender económicamente de los hijos

    Claro está que a su vez muchas mujeres han asumido en grandes proporciones la manutención económica de su familia e hijos (as), el asumir de la autoridad, sin embargo, en estas clases económicas es un hecho más frecuente en una situación de ausentismo de la figura paterna; esto responde necesariamente al hecho de que el hombre se presenta como impedimento a la realización, académica, laboral y profesional de la mujer.

    El hecho de que en la familia burguesa normal, sea el hombre quien posea el dinero, ese poder que reviste forma sustancial, y disponga acerca de su empleo, hace que también en la edad moderna la mujer, los hijos y las hijas sean los `suyos´, poniendo su vida en sentido amplio, en sus manos, y obligándolos a subordinarse a su dirección y su mandato.

    Ahora bien, ¿Por qué sucede ello?, ¿Por qué el hombre impide y dificulta el desenvolvimiento de la mujer? Podemos vincularlo a que la emancipación de aquel reducido espacio que se le ha asignado, se presenta para el hombre como una amenaza, se ponen en la palestra sus temores de perder o ver disminuida su autoridad familiar, asociando directamente la independencia de la mujer con la disminución de su masculinidad.

    En las familias de las clases populares por el contrario es natural la corresponsabilidad en cuanto el aporte económico de los cónyuges, producto del limitado poder adquisitivo de estos y las limitaciones para cubrir las necesidades básicas. En nuestro país, el ocio de las mujeres de las clases populares es muy bajo, estas se verán en la necesidad de asumir la responsabilidad económica de su familia, convertidas en proveedoras, producto del ausentismo masculino – paterno, además de ello, para Parsons (1968) “la madre administra la disciplina, reprueba el mal comportamiento, en sí es un símbolo de ´buen comportamiento` para el hijo” (p. 57)

    Será en las familias proletarias donde se hará presente con mayor énfasis el ausentismo paterno, y el debilitamiento o inexistencia de su autoridad, ya sea en su ausencia o presencia, hecho producto de su incapacidad de ser proveedor, y por tanto la pérdida de dominio y autoridad sobre el grupo familiar.  Ahora bien, ¿Qué motiva ese ausentismo masculino – paterno? ¿Es la irresponsabilidad paterna constitutiva de la idiosincrasia venezolana? Es a razón de ello, que la familia venezolana de las clases bajas o populares tendrá dos variantes o formas de organización socio-familiar:

  • Familia monoparental (Ver Anexo 4), materna, aquella institución familiar en donde el hombre está ausente y la mujer sola a cargo de su organización familiar.
  • Otras donde si bien el hombre está presente se encuentra sujeto constantemente al riesgo de ser expulsado del núcleo familiar por su incapacidad de satisfacer las necesidades económicas, sexuales y afectivas de la familia y su cónyuge.

    Cualquiera que sea la forma organizativa de esta familia, sea en la familia burguesa, pequeño burguesa o proletaria; el poder y autoridad del padre vendrá dado por la capacidad de dar respuesta y satisfacer las necesidades de esta familia, es decir por su capacidad como proveedor.

    En la forma organizativa de la familia burguesa, la mujer siempre tendrá la posibilidad de expulsar al hombre, pero esto significaría también una ruptura con el modelo, los valores y la moral instaurada, razón por la cual muchas mujeres se abstienen, como medio de evitación de la sanción social, pues, cualquier intento de emancipación femenina, de liberación de las actividades que le han sido atribuidas, serán sancionadas según códigos jurídicos y/o morales de una sociedad específica.

    Ligado a estas sanciones será mediante instrumentos ideológicos como el instinto maternal y el amor romántico, que se intentará evitar la expulsión el hombre del hogar y el mantenimiento de la mujer a un rol arbitrariamente impuesto. Conducta a su vez legitimada por:

    Tradiciones de todo tipo, dogmas y ritos religiosos, imperativos morales, leyes y costumbres, convenciones del “saber vivir”, de la “civilidad” o de la etiqueta, estilos estéticos y reglas de las diversas formas de arte, sistemas económicos de producción, de intercambio y de distribución, procedimientos técnicos e incluso tecnológicos, todos esos fenómenos presentan el carácter común de ejercer sobre el individuo una presión. Formas que el individuo encuentra ya establecidas, según Cuvillier (1973) “cuyo origen ignora a menudo y ante las cuales puede adoptar dos actitudes: o bien conformarse o combatirlas. (p.100-101)

    Será este proveer el que dará sentido a su masculinidad, por ello, el hecho de no proveer o ver disminuida su condición de proveedor económico, afectivo y/o sexual para con la mujer, supondrá un nudo crítico en la estructura organizativa de la familia, al contribuir significativamente a la merma de su masculinidad, materializada en  autoridad y dominio.

    ¿Podríamos entonces inferir que a partir de allí radica la férrea oposición de la patriarcalidad al trabajo femenino? ¿Radica allí la oposición a la búsqueda de la mujer de otras fuentes de afecto que no sea la pareja y los hijos (as)? ¿Deviene de allí la oposición del patriarcado a la homosexualidad por ya no ser el hombre el único proveedor de placer sexual, sino que también se ha convertido en receptor?

    Este hecho en su conjunto va a presentarse a la heteropatriarcalidad (Ver Anexo 5) como la pérdida del hombre en cuanto hombre tradicionalmente concebido, el hombre se ha diluido, ya no es hombre, solo queda su fantasma, en el contexto de una sociedad que ha pasado a prescindir no solo de él y su autoridad, sino también del escenario de ejercicio de ésta por excelencia, la familia.

    La familia venezolana es distinta a la familia Europea y Anglosajona, es nueva, pero, pese a ello, predominan concepciones de carácter sexista, se mantiene y persiste el temor de la madre a la homosexualidad del hijo, la exaltación del pene y de la masculinidad, pues persiste el sexismo, como mecanismo real de resistencia; el patriarcado se resiste al cambio, a la novedad, a la modificación de la estructura familiar y del papel de la mujer dentro de ésta, por lo cual habrá de exaltar y promover la necesidad del hombre en las institución familiar que ha pasado a prescindir de él.

    Sin embargo, el patriarcado falonarcicista no acepta su caducidad y anacronismo, ataca e intenta frenar el cambio mediante la acentuación de los aspectos conservaduristas y represivos, por lo cual proporcional a mayores cambios y avances en la situación de los géneros y más específicamente de la mujer y su salida del sometimiento del hogar patriarcal, habrán de aumentar equiparable y significativamente las prácticas sexistas manifiestas en la violencia directa e indirecta.

    En la familia europea y anglosajona, los lazos familiares se han perdido, sus miembros dispersados, la autoridad del padre ha declinado. La forma organizacional de la familia Venezolana por el contrario, a pesar del sistema que la engendra y la ha intentado socavar, mantiene estrechos lazos familiares, sus miembros se han unido, la autoridad del padre ha declinado, la de la madre se ha fortalecido, es por esta razón que, la familia al igual que otras instituciones socio – culturales, según Nietzsche (1999) deben ser  “repensadas individualmente, rastreadas individualmente a través de los tiempos y de los pueblos, de las grandes y pequeñas individualidades” (p.32)

    Dando paso y reconociendo que se están dando cambios de gran importancia en el ámbito de la sexualidad, las relaciones, el matrimonio, los roles y la familia. Así mismo, el surgimiento de nuevos mecanismos relacionales de la sexualidad y la relación amorosa, como las uniones libres, matrimonio ambulante, y comunidades swingers, contribuirá a socavar más aún la institución familiar clásica pese a la pretendida continuidad de dominio.

    La familia venezolana actual es el resultado de la integración entre el español, el negro y el indio, durante la época de la conquista y la colonización. La base de la sociedad humana es la familia, su origen es el padre y la madre. La constitución de la familia tiene su origen en el matrimonio. En el matrimonio, un hombre y una mujer se unen, (es decir, se casan o contraen nupcias) conforme a la ley. En el acto de casarse, son contrayentes; cuando ya se han casado son cónyuges. Así queda constituida en principio, la familia, que luego, con los hijos y sus descendientes, formará una familia completa. En las sociedades modernas, la familia es monogámica: un hombre puede tener una sola esposa, y una mujer un esposo, unidos en matrimonio.

    La familia se entiende como la célula fundamental de la sociedad. Esto implica que es en la familia en donde se recogen los principios y valores morales y éticos que individualmente debe poseer una persona para convivir felizmente con su entorno social. En Venezuela la familia tiene tendencia a ser constructiva y participativa, pero en algunos casos, sobre todo en la clase social baja, tiende a una descomposición en relación a los aspectos referidos a los valores: Significa que en muchos casos los hijos le faltan los respetos a los padres; no dan cuenta de lo que hacen en la calle (sea bueno o sea malo); no llegan en los horarios preestablecido con los padres; no aceptan buenos consejos; andan en malas juntas; realizan actividades poco confiables y dudosas; mienten con gran frecuencia; entre otras tantas que se pudieran mencionar.

    Es, sin duda, este individuo el que va a conformar la sociedad que continuamente se interrelaciona en los distintos sistemas productivos como por ejemplo: las escuelas, los trabajos industriales, los hospitales, entre otros, llevando consigo toda esa carga de desvalores que perturban el correcto desenvolvimiento de dichos sistemas y dando una imagen al mundo de un profundo deterioro de nuestra sociedad y, por consiguiente, de nuestra familia. Esta realidad redunda a favor, lamentablemente, con los altos índices de delincuencia, de inseguridad, de bajo rendimiento escolar (con alta deserción de la misma), de embarazos precoces; destrucción del ambiente y su entorno, en fin de alta corrupción social que amerita correcciones a tiempo para rescatar a esa familia venezolana que tuvimos en tiempos pasados, de grandes valores, de respeto a sus costumbre y a su patrimonio. Esta tarea ha sido asignada a la educación y por lo cual ésta tiene un gran reto por cumplir. En la Venezuela de las épocas pasadas, principalmente la de los años 40, Venezuela era otra, comparada con la de hoy día, porque en esas épocas (según nuestros padres y abuelos que lo vivieron) dicen que todo era muy calmado, los venezolanos éramos distintos: seguíamos las reglas, no había tanta delincuencia, se cantaba el himno, se amaban los símbolos patrios, había menos contaminación y no botaban basura en las calles por costumbre, porque se sancionaba a los que lo hicieran o se le llamaba a los padres; también, había ese respeto hacia los mayores.

    También, actualmente existe una tasa muy elevada de jóvenes venezolanas, que son madres solteras, pero la mayoría no estudiaron o no completaron el bachillerato o la universidad, crían a sus hijos sin experiencia y algunas veces sin nadie que las ayude, entonces, en la mayoría de los casos, los cuidan y los educan mal, y con mucho consentimiento, sin que la madre no les haya enseñado que si lo hacen mal se les castigará para su oportuna corrección, esto da lugar a que él o ella crean que lo malo es bueno, y origina que el joven marche por rumbos inciertos o poco productivos. En algunos casos buenos, el joven no muestra simpatía o motivación hacia el estudio transformador y se convierte en persona que trabaja como albañil, cuidando esquinas, buhoneros, entre otros, teniendo, y esto es lo lamentable, suficiente capacidad para llegar más lejos en su vida transformadora.

    Lo que no se quiere es que la Venezuela del futuro, se convierta en un lugar muy desagradable para vivir; lo que se quiere es que el país se recupere a lo que era (un país ejemplo del mundo por sus valores, por el respeto, por lo emprendedor a las cosas transformadoras y buenas); sea un lugar sin peligro alguno de muerte, injusticia e inseguridad por causas de las personas que la habitamos.

    En Venezuela existen distintos tipos de problemas de carácter social; uno de los temas más importante que inciden sobre él es el de la economía que influye en la mayoría de los sectores sociales; el problema es que Venezuela es un país muy rico; pero contrariamente tiene problemas económicos demasiados importantes y se reflejan ante el mundo como si fuésemos un país pobre carente de lo más necesario para el crecimiento de nuestra sociedad; se cita como ejemplo el hecho de que una de la razones es que las personas, que no estudiaron busquen otras opciones de trabajos donde ganan cantidades inferiores que apenas alcanzan para la existencia de un día, eso genera que no tengan la visión de querer avanzar en su proyecto de vida personal dando lugar a que no halla impulso hacia los aspectos más importantes que producen crecimiento personal, y por consiguiente, comunitario, como sería el de educarse continuamente en carreras más productivas que le lleven a las Universidades inclusive.

    Evidentemente al obtener bajas porciones de dinero por trabajos muy poco remunerados los individuos se ven en apuros en los distintos pagos a los que están obligados como son: problemas de pago hogareño que sí, el pagar el agua, la energía eléctrica, el gas, los alimentos, la educación de primera etapa, entre otras: cuando se va a comprar algo necesario no alcanza el dinero para nada, por eso el problema económico que se presenta en la mayoría de los hogares del país y por los costos tan altos que a veces implican pagar, algunos miembros familiares optan por robar o acudir a la corrupción de actividades sobre las cuales están responsabilizados, creando una corriente importante de antivalores.

    Y es aquí donde queríamos llegar ya que nuestra estructura social en épocas pasadas era bien parecida a la actual, pero estaba regida por los valores y principios que debe asumir bien un individuo. Debe recordarse que éramos en su mayoría provenientes del sector agrícola: es decir provenientes de agricultores que tenían como aval importante el saber trabajar para obtener el pan de cada día, así como un profundo apego a los valores, de modo que lo que vivimos hoy día puede atribuirse casi exclusivamente a la desaparición de los valores, factor importantísimo en el crecimiento de cualquier país.

    Otro de los problemas que incide en la familia venezolana y que se debe solucionar mediante una concientización plena es, sin duda, el concerniente a la corrupción. Este problema se ve en la mayoría de los que abarcan un poder tal como: la política, los héroes de la ciudad, los que cuidan o hacen archivos, los abogados, los vendedores, la personas, entre otros. ¿Qué es la corrupción? Una muestra de corrupción son aquellas personas que se dejan sobornar con alguna cosa a cambio de otra cosa mala o que perjudique a otras personas. La corrupción es un flagelo social muy aplicado en las organizaciones, especialmente en las públicas, como práctica consistente en la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, por parte de sus gestores en provecho único de ellos aún perjudicado el resto de la comunidad de la manera más sucia de venderse, pero a esas personas que se dejan sobornar por la otra persona no le importa si perjudica, o no, a muchas o un país entero.

    Las personas estamos acostumbrados a que nos den dinero desde niños pero algunos tienen esa avaricia y codicia por el dinero, eso nos causa un cambio psicológico: esto quiere decir que a esa personas le importa más el dinero que la vida y el bienestar de los demás con los cuales incluso comparte; esto da  lugar indirectamente, que cuando las personas se enteran, que esa otra es corrupta sencillamente no la quieran, no la llamen, no le creen y lo traten con indiferencia produciendo en algunos casos separación de las mismas familias por no saber controlar esa tendencia hacia el apego a la corrupción. Al final la percepción, entonces, que asumen los jóvenes de hoy día sobre la corrupción es:

  1. Que es un antivalor que puede ser copiado por los jóvenes y le dan grandes beneficios en corto tiempo.
  2. Que el joven puede dejar de estudiar asumiendo que puede obtener los mismos beneficios que la buena educación pudiera darle y lograrla más rápido a través de la corrupción.
  3. Cree que la corrupción es mejor que la satisfacción del trabajo duro y con dignidad ya que percibe que, aparentemente, progresa más rápido que los que se esfuerzan con el estudio y el trabajo enaltecedor. Estas influencias son algunas de las razones de que en la actualidad haya tanta corrupción en Venezuela y, en el exterior, se entienda que son valores no controlados en el seno de la familia.


CRITERIOS POSITIVOS O BUENOS DE LA FAMILIA VENEZOLANA

    Si bien es cierto que, hasta ahora, se ha venido enumerando algunos aspectos o factores que, decididamente, son lo más resaltantes cuando de antivalores se habla y que constituyen una muestra importante de antivalores que se deben estudiar más a fondo para conseguirle una solución satisfactoria, y corregirla a tiempo; a nuestro entender, como alumnos del Básico, debemos resaltar que nuestra familia venezolana también está constituida por grandes muestras de familias representantes de valores, que se reflejan en la vida cotidiana, donde los padres prestan una continua lucha por el rescate y la salud de los verdaderos valores éticos, morales y religiosos, y que es lo que se nos inculcará mediante la buena educación, impartida acá, en nuestra escuela Madre Emilia, para rescatar la Venezuela que queremos y de la cual nos sentimos orgullosos, por eso a continuación se enumeran algunas cosas que consideramos positivas o buenas y algunas consideradas como negativas o malas en nuestra familia venezolana y que, éstas últimas, deben ser bien estudiadas para ser corregidas en bien de los miembros familiares, especialmente los niños. Se enumeran a continuación:

  • Unas de las cosas que hay en las familias venezolanas es que todos se quieren y se apoyan entre si cuando tienen problemas serios como, por ejemplo de salud; eso es bueno.
  • Los niños de la familia son muy queridos, y los que no, como los vecinos, también.
  • Todos son unidos: luchan por una causa común: Hacer bien las cosas con el trabajo reivindicador.
  • Los visitantes conocidos se les quiere como si fueran de la familia.
  • Los vecinos se ayudan mutuamente.
  • Se les enseña a los niños y jóvenes lo que es bueno y malo.
  • Se les da la razón o no a los jóvenes, cuando creen que algo es justo o injusto, siempre con la condición de que el joven aprenda lo bueno.
  • Se les da a todos el derecho de estudiar.
  • Se les premian, a la mayoría, las cosas buenas que hacen o se ganan trabajando o estudiando duro.
  • La mayoría o todos creen que Dios existe y eso es demasiado bueno; y eso se los inculcan los padres.
  • Todos tienen una razón buena de querer a la familia: debido a que ellos reciben buenos valores que le harán crecer como un adulto sano y útil a su sociedad.
  • La mayoría de los visitantes les agrada la familia, cuando ésta es hospitalaria.
  • Los amigos y familiares lejanos son muy unidos y algunas veces actúan sin pelear.
  • Los niños son la alegría de la familia y la razón de vivir de ese seno familiar por lo cual dedican mucho tiempo en el cuidado de los mismos.
  • Los abuelos entretienen, ayudan y crían a los nietos y les transmite las costumbres, principios y valores por ellos vividos, eso es buenísimo para la preservación de nuestras costumbres y patrimonio social.
  • A todos se les da una buena razón de querer a las familias en las cuales le han correspondido vivir.
  • Todos trabajan por una buena familia que sea ejemplo de la sociedad donde se desenvuelve.
  • Y, la más importante, es que todos trabajan unidos y los amigos tienen una gran solidaridad y confianza.


CRITERIOS NEGATIVOS O MALOS DE LA FAMILIA VENEZOLANA

  • Que la minoría de las familias no se agradan por peleas internas insignificantes dentro de los valores familiares.
  • Algunos mantienen una costumbre y religión poco creyente en Dios cuando permiten la intromisión de sus hijos en malos actos.
  • Se alejan demasiado y sin saber o sin pensar mucho en las familias que lo criaron y alimentaron.
  • Algunos no quieren a sus hijos: sobre todo aquellos padres irresponsables que los procrean y abandonan en su plena infancia.
  • No son muy unidos en algunas cosas, como por ejemplo: tradiciones, costumbres, modas, etc. Esto quiere decir que, sobre todo los más jóvenes, no respetan las maneras de pensar de sus abuelos y progenitores en cuanto a cómo celebran la navidad, semana santa, entre otras, al no conservar sus costumbres y vulnerarlas.
  • Se mantienen ocupados en cosas no importantes y abandonan el cuidado de los niños e hijos que tienen que cuidar. Como por ejemplo, andar de casa en casa y no dedicarse a sus responsabilidades verdaderas.
  • Algunos molestan y maltratan a los niños.
  • Algunos mantienen la costumbre de chisme.
  • Unas familias se tiene un odio total por hechos ocurridos, insignificantes.
  • Ellos encuentran la razón de vicio y avaricia: como por ejemplo el padre alcohólico que, incluso roba a la propia familia, para satisfacer su horrendo vicio.
  • En ocasiones los niños pasan mucho tiempo en la calle a merced de malas amistades, y aprovechando el ocio a favor de los vicios y malos hábitos. Por ello incluso llegan a odiar el estudio en la escuela. Los padres de estos niños se hacen a la vista gorda.
  • Dejan que los niños pasen excesivo tiempo viendo la televisión sin una correcta orientación familiar y en muchos casos sin una correcta programación educativa. El caso se extrema cuando se le permite que los hijos permanezcan en contacto con los “Cyber” (Internet) sin una adecuada supervisión. En ella el joven aprende violencia con los juegos, un mal léxico, vulgaridades, irrespeto, pornografía, en otros, en detrimento de su formación.
  • No les inculcan a los niños una educación en valores religiosos, yendo con ellos a las congregaciones religiosas obligándoles con, el ejemplo, a creer en Dios y dándole ese temor a favor de su sabiduría y su bienestar corporal, moral y espiritual.
  • Les permiten a los jóvenes valores TRANSCULTURIZADOS como son la música reggaetón, la celebración del Halloween, los Pilsen en el cuerpo, los tatuajes, entre otros. Mediante ellos se transmite siempre la rebeldía y el desorden personal.
  • No hay una comunicación permanente con los jóvenes en la que se interesen por sus proyectos de vida; escucharlos en sus inquietudes; preocupación por su día a día escolar, como van en la escuela, sus tareas y muchas veces se desvinculan hasta de la escuela y sus profesores a quienes le han atribuido la correspondencia del cuidado y la transmisión de valores (responsabilidad casi exclusiva de los padres) como si la escuela fuese un gran preescolar.
  • En algunos casos cuando el joven comete un error social palpable el padre fortalece el antivalor del mismo, cuando insulta y ofende a la persona agraviada en provecho del joven y en presencia del mismo, haciéndole sentir a éste que lo malo que hizo es sumamente bueno y creándole un dañino antivalor, además de una profunda herida con el vecino maltratado moralmente.
















CONCLUSIÓN

    La nueva familia venezolana es diferente a la de sus antepasados; antes era un país con familia patriarcal pero de un tiempo para acá es más matriarcal, la madre lleva ‘los pantalones’ o ‘riendas’ del hogar. Con la modernidad  y sus grandes beneficios  políticos, económicos y tecnológicos, han provocado buenos resultados en la sociedad venezolana, a su vez acarreando consecuencias. Con la vida cada vez más cara, el grupo familiar se ha ido reduciendo progresivamente de grupos familiares de siete o más hermanos a hijos únicos o niños con un solo hermano. La composición actual de la familia venezolana es derivada de una variación demográfica que ha ocurrido durante años en Venezuela como consecuencia de cambios políticos y sociales.

    En Venezuela, como al igual que el resto del mundo, el ciclo vital de la familia ha cambiado: ahora quienes nacen vivirán varios años con sus padres y sus madres; solos con sus madres (después de que se divorcien); después vivirán con sus madres y sus padrastros; luego solos algún tiempo; y después pasarán a vivir con alguien pero sin casarse; se casarán y se divorciarán: volverán a vivir solos y volverán a casarse. No existe estabilidad en el orden familiar y su composición, características e concepción como institución se ve afectado por la modernidad. Los números de matrimonios son menores; actualmente a la gente le gusta vivir en concubinato y la concepción de hijos ya no es considerado de la misma manera: para unos una carga, para otros un milagro.






REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS









































https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQM3zfrvEX75S73r69HE-GRkG5Qi5XLgwwinqDvfSBRtTjsD-twtg70wrDRbASZbu3rIGcZeCHxinR549G-eX0no5Hi_cFT-cD3WNeGh2flDdMjpPAN8SBa0qB-fGLnQHKGNz4MK4SQQY2/s1600/f1.png
Anexo 1. Familia Extensa



https://cienciasnaturaleem1.wikispaces.com/file/view/familia-vector-1_48500.jpg/314918514/311x297/familia-vector-1_48500.jpg

Anexo 2. Familia Nuclear


http://estherpinedag.files.wordpress.com/2012/02/retro-housewife.jpg?w=529
Anexo 3. Familia Patriarcal


http://circuloatenea.files.wordpress.com/2013/07/1-1.jpg

Anexo 4. Familia Matriarcal o Monoparental








https://palabrademujer.files.wordpress.com/2010/07/20091221-lesmadres.jpghttps://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjXQH15_98jjPlVAdtIEySFwZ8dw-uHI0kUlDb3o-FOcGSgwC_3eWEiRoW-bb1q8I9vdBrf_Xic1WnAFPfFIsDpYn_1CZ1jOov-7f2WNYh7nDuzZ6ubQOBA4fLrzOm3KQqahyphenhyphentVgHxNP5xM/s1600/FAMILIA+HOMOPARENTAL.png

                                            Anexo 5. Familia Homoparental